Fase final: Presentación de mi proyecto en una página Web
Actividad integradora
Embarazos no deseados en preadolescentes y adolescentes
Educación sexual general en las escuelas




La educación sexual puede ayudar a reducir el número de embarazos no deseados, especialmente entre menores de edad, mediante la sensibilización sobre estos temas, pero también mediante la ampliación de los conocimientos y habilidades en materia de anticoncepción. El aumento de los embarazos (no deseados) y los abortos entre las niñas debe promover un mayor desarrollo e implementación de conceptos apropiados para mejorar el conocimiento sobre la fertilidad y la anticoncepción.
Desafortunadamente, también hay niñas que están siendo rechazadas, por lo que tienen que irse de casa. En general, y especialmente para estas madres jóvenes, existe la posibilidad de contactar centros de asesoramiento para planificación familiar, entonces la niña puede tomar decisiones sobre cómo concebir su futuro con el niño, ya sea para interrumpir la asistencia escolar durante la duración del embarazo.
Si un adolescente tiene un embarazo no deseado, duplica el riesgo de suicidio, pues este afecta emocionalmente a las preadolescentes, como factor de ansiedad por la falta de apoyo por parte de la sociedad e incluso de los mismos padres, lo que es más fuerte el temor e incapacidad de afrontar e económicamente el nacimiento de un recién nacido, o jóvenes solteras quedan embarazadas por violación. Para algunos, tal trauma parece golpear heridas emocionales que luego se manifiestan en un comportamiento autodestructivo, lo cual puede causar el suicidio.



El embarazo adolescente es un problema que se sigue existiendo en todos los países del mundo, a pesar de que los gobiernos tienen programas para enseñar cómo prevenir los embarazos entre adolescentes y los efectos negativos que trae a las adolescentes embarazadas.
Los adolescentes a menudo no tienen perspectiva de una vida como ser padres, especialmente en relación con la vida laboral, además, es muy notable que las "madres adolescentes" a menudo provienen de familias económicamente desfavorecidas o fracturadas, por lo que también pueden surgir aún más problemas para las madres jóvenes.
Uno habla de un embarazo preadolescente o adolescente cuando la futura madre tiene menos de 15 o veinte años, estas mujeres adolescentes embarazadas, se encuentran entre las embarazadas en riesgo, pues todavía están en su propio desarrollo y su madurez física, mental y social aún no está completa. En entrevistas nueve de cada diez chicas jóvenes describen su embarazo como no planificado y los embarazos de adolescentes tienen consecuencias para el bebé y las madres jóvenes. Según las estadísticas, el número de embarazos adolescentes ha aumentado considerablemente en los últimos años. La razón principal que ven los expertos es la falta de educación y experiencia de los jóvenes.